Puntos de toma en tenis en diferentes pistas
- Serghei Visnevschii

- 27 oct
- 4 Min. de lectura

El ángulo en la fotografía de tenis no se trata de encontrar un “buen sitio al lado de la pista”. Es una elección que cambia el sentido de la imagen. El mismo punto puede transmitir fuerza, espacio, drama, velocidad o, por el contrario, resultar plano y sin vida. Todo depende del lugar donde se sitúa el fotógrafo. A continuación, las posiciones más habituales, que generan distintos significados visuales y se utilizan realmente en los grandes torneos.
Línea lateral
La posición junto a la línea lateral, frente a la silla del juez, es la más versátil y común. Desde ahí se capturan la mayoría de los planos clásicos: intercambios, servicios, golpes de ataque, diagonales. Se lee bien la interacción entre los jugadores y el resultado es profesional, aunque a veces demasiado rutinario. El objetivo principal es limpiar el fondo, ya que normalmente hay publicidad y público detrás del jugador. Un diafragma abierto ayuda a aislar al protagonista y eliminar el ruido visual. Los fotógrafos con más experiencia también disparan desde la línea de saque, obteniendo imágenes muy expresivas cuando el jugador se estira hacia la pelota formando la línea “pelota — raqueta — jugador”.
Detrás de la línea de fondo
Una posición óptima para mostrar la potencia del golpe, el servicio y el trabajo de piernas del jugador en el lado opuesto. El único riesgo constante es la red, que puede romper la composición. Una ligera elevación del ángulo o un pequeño desplazamiento lateral suele ser suficiente. A veces la red incluso ayuda cuando el jugador avanza: se convierte en parte de la narrativa. Para este ángulo se necesita un teleobjetivo de 400–600 mm.
Aberturas a ras de pista
En los torneos de Grand Slam existe algo que casi no se encuentra en otras pistas: aberturas técnicas a ras de superficie. Por ejemplo, existen en el US Open y Roland Garros, pero no en el Australian Open. La cámara queda prácticamente sobre la pista, ofreciendo un encuadre cerrado, perspectiva directa y sensación de presencia. Los momentos más expresivos aparecen cuando el jugador golpea y gira 180°, entrando en la imagen el rostro, la raqueta, la pelota y el público. La máxima plasticidad surge cuando ambos jugadores están en la red y la pelota pasa entre ellos.
Tomas desde arriba
Las tomas en altura son un recurso poco habitual. Los drones están prohibidos: si el juez ve uno, el partido se detiene. El ejemplo más claro es el de Rod Laver Arena en el Australian Open, donde existe una plataforma especial bajo el techo para fotógrafos. El acceso es limitado y de pago, y todo el equipo debe ir asegurado con cables. La recompensa es un tenis convertido en geometría: líneas, luz, sombras, simetría. En la mayoría de los estadios esto no existe, y sólo quedan las últimas filas de la grada, que permiten buenas composiciones, pero sin la misma profundidad.
Gradas
No hay que subestimar las tomas desde las gradas: permiten encontrar ángulos interesantes, especialmente si tienes en cuenta los gestos técnicos de cada jugador. En los grandes torneos está prohibido acceder a las zonas VIP, y los puntos autorizados están claramente señalizados.
Pistas de entrenamiento
Aquí hay más libertad y menos restricciones. Se puede experimentar con gran angulares, ángulos bajos, puntos de vista inusuales y movimiento (siempre con ética). A veces el carácter del jugador se revela mejor en un entrenamiento que en el partido. Este tipo de imágenes son cada vez más valoradas: el jugador, su equipo, los detalles de interacción — el backstage real del tenis.

Pasillos, túneles, mixed zone
La vida del torneo no termina en la línea de fondo. El jugador entra en la pista, sale de ella, habla con el entrenador, con los aficionados, concede entrevistas. La luz puede ser complicada y el espacio reducido, pero las emociones son auténticas. Estas escenas a menudo terminan siendo las más memorables, porque muestran a la persona y no la técnica.
Y lo más importante
Fotografías tenis, pero no sólo el partido. Mira más allá. Los aficionados, los momentos inesperados, las escenas que nadie espera pueden ser más poderosas que un ace. Recuerdo la semifinal Zverev–Nadal en Roland Garros 2022: muchos fotógrafos se marcharon esperando un quinto set, y minutos después llegó la lesión, la imagen que marcó el torneo. La suerte en la fotografía de tenis es atención e intuición. Hay que ver más lejos que el servicio.
Ajustes habituales que utilizo
— dos cámaras (Nikon D5 o Z9): 24–70 y tele 200–500 en monopié
— velocidad alta (1/1600 o más)
— ráfaga continua
— enfoque al rostro/ojos
— diafragma lo más abierto posible si el fondo distrae
— ordenador portátil, lector de tarjetas y cable en la zona de fotógrafos
— y siempre: estar listo para capturar el momento clave!
Todas las fotos © Serghei Visnevschii


















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